Nochevieja en España: 12 uvas y cotillón

España celebra la víspera de Año Nuevo con la tradición de tomar doce uvas al ritmo de las campanadas de medianoche para desearnos suerte en el nuevo año. El punto de referencia en España es Madrid, en la Puerta del Sol, donde los canales de televisión transmiten el evento en vivo para todo el país.

En las ciudades españolas generalmente hay una plaza principal del ayuntamiento donde la gente se reúne para tomar las uvas en este momento. Hay algunas ciudades y pueblos ricos en tradición y gran ambiente.

En España, el Año Nuevo generalmente se celebra de diferentes maneras. En Nochebuena las familias a menudo se reúnen, en la víspera de Año Nuevo o Nochevieja es típico que se reúnan con los amigos. A veces lo hacen en grupos, en una casa, donde hacen una buena cena y celebran con cava o champaña tomando también uvas juntas, viendo la televisión en vivo los carillones de la Puerta del Sol en Madrid. También suele salir y celebrar en restaurantes, hoteles, como turistas que visitan España en esta fecha. Los establecimientos de servicios incluyen: cena o cena con cotillón. Podría ser también solo un cotillón, después de la cena.

El término Cotillion es una palabra francesa que procede de un baile en parejas de cuatro dell siglo XVIII, donde los participantes, especialmente los de la realeza, se reunieron para presentarse socialmente y coquetear con otros bailarines. La fiesta de Año Nuevo en España también se conoce como cotillón, es un servicio ofrecido por bares, restaurantes y hoteles, que incluye 12 uvas, cava o champaña, algunas bolsas de confeti, sombreros, collares y otros accesorios para una fiesta de disfraces. A veces incluye música en vivo y baile hasta altas horas de la madrugada, con la posibilidad de barra libre hasta 5 o 6 de la madrugada.

Las doce uvas se hicieron populares en España en 1909, cuando los agricultores de Alicante, Murcia y Almería impulsaron esta tradición. Fue un año con grandes excedentes de uvas. Existen precedentes de esta práctica desde 1896, donde los ciudadanos tomaron las uvas en la Puerta del Sol para protestar por la vida burguesa en la plaza. Era una tradición importada de la aristocracia francesa.